Precisa mil por mil, motivadora, generadora de pensamiento lateral.
Te adoro Cris y lo que sucede conviene; que bueno que sucedió haberte conocido!
Fue como encontrarme con una Sócrates contemporánea que aguijoneó suavemente mi conciencia para que pudiera deshacerme de creencias viejas que no me permitían ver la configuración real de la situación en la que me encontraba inmersa… Fue catárquico. Fue confianza en mí que había perdido. Es una guía que TE escucha y que te devuelve reflejos de tu propia imagen y situación que no estás pudiendo percibir. Fueron nuevos ojos para un paisaje en movimiento.
“Tomé contacto con Cristina Quintana, hace varios años ya, en un momento en cual tuve la suerte de poder armar un equipo para gestionar y comandar un plan relacionado al ámbito de la Salud, en este caso la Dirección Médica de un grupo de clínicas.
Ese plan, esa ilusión que tuvimos, no hubiera sido posible llevarla a cabo sin la participación protagónica e inicial que realmente nos cambió la visión, sobre todo en lo que es el trabajo en equipo, independientemente que yo creía y creo en trabajo en equipo, pero la visión que tuvimos desde la primera reunión, en donde conocimos a Cristina, fue fantástica, a partir de allí fue todo suma, fue todo alegría y fue todo un acompañamiento, no solo cuando nos iba bien, si no cuando aparecían las situaciones a mejorar. Las herramientas que aprendimos en esos tiempos hoy por hoy las seguimos utilizando en nuestros equipos de trabajo con médicos, enfermeras y los demás sectores que conforman el mundo de la salud.
Disfruto inmensamente las sesiones de coaching con Cris, que me hicieron ser una persona más abierta a las situaciones y formas de pensar a las que estaba acostumbrada. El coach y la inteligencia emocional son fundamentales para todo profesional que desea aumentar sus posibilidades en el área laboral y en la vida diaria; y Cris es la mejor profesional para tomar las herramientas que te ayudan a logarlos.
Cris posee una energía positiva muy fuerte que transmite con cada momento que comparto con ella, siempre buscando la solución a todo y con predisposición para no quedarse mirando sólo el punto sino el total de la hoja.
Excelencia es mi palabra para describir a Cris como profesional.
Brinda excelencia y la exige por igual. Es apasionada y auténtica. Realmente cree lo que cree con convicción, y eso hace que quienes la conocen crean en ella. Y creer nos salva.
Ella dice que la primera persona en la que cree es en ella misma.
Puedo decir que tiene mucho conocimiento y lo sabe contar, que le gusta la historia del mundo, que se emociona con muchas cosas pequeñas, íntimas, sentidas. Que se ha preparado y perfeccionado a lo largo de los años en su disciplina, con un compromiso digno de admirar.
Cualquier conversación que puedas tener con ella aplica fundamentalmente para aquellos que creen en la autotransformación.
Después de todo... como ella misma una vez me dijo, todo depende de uno mismo.
Creo que Cris se construyó a sí misma como una excelente coach emocional porque ella es emoción.
Cristina fue y es factor determinante en la conformación de un buen equipo de trabajo, que siempre va por más, que se respeta y que no se achica frente a la adversidad. Gracias a ella se resolvieron muchos problemas.
Lo más preciado de trabajar con Cristina es que ofrece rápidas soluciones; las problemáticas que por ella pasan se resuelven de la manera más veloz. Es asombroso y nunca antes visto ni experimentado por mí. Además destaco su velocidad mental para enfrentar los inconvenientes desde el discurso, apelando a su costado más amable, más tolerante, más consciente y más respetuoso.
Es increíble pero funciona y estoy muy orgullosa de pertenecer a un grupo donde el Coaching es un departamento fundamental, al igual que en las empresas del primer mundo.
Gracias Cristina por tu calidez, tu palabra justa, tu apoyo y contención, pero por sobre todas las cosas por enseñarme a pararme sobre mis pies, evaluar la realidad y transformarla para el bien común. Infinitas gracias!
Cuando llego Cristina transformó el ambiente con su sola presencia, todos se acercaban a saludarla efusivamente y ella con una sonrisa retribuía el notorio afecto y a su paso todo era alegría, humor, simpatía y determinación. Me buscó con la mirada, me dio la bienvenida a la empresa y tuvimos una charla inolvidable me permitió tomar la decisión de quedarme y comprometerme con la empresa. Vale aclarar que lo conversado no rozo lo laboral, ella solo pregunto sobre mí, mis intereses, mi vida, mi historia, me pregunto: Cuál era mi sueño. Me escucho.
Yo del coaching tenía una vaga referencia. Y no me había despertado el interés esa disciplina hasta que Cristina me definió lo que significaba para ella ser coach. Y esto no lo hizo como yo me hubiera imaginado, como su profesión sino "Como su estilo de vida". Sobre la implicancia de responsabilidad y compromiso que se asume con el "Otro" y que la condición necesaria y excluyente para ejercer la carrera es "sentir amor y pasión por las personas".
Después de ese primer encuentro, elegí ser parte de Crónica ya que esa empresa por sobre las demás ofertas que pudiese tener en mercado, me daba el valor agregado de tener coaching. Y coaches, sobre todo en este tiempo.... hay muchos, pero Cristina Quintana es un lujo y diferencial que otras empresas no tienen.
Me interese por el mundo del coaching, asi como por las experiencias relatadas de su trayectoria de veinte años en el mercado. Leí muchísima bibliográfia de su recomendación. Gracias a ello y a ella, supere grandes obstáculos en mi vida laboral y personal.
Me me enseñó a validarme y validar al prójimo, a ser mejor compañera y persona. Me enseño el concepto de trabajo de excelencia. Me brindo su tiempo y disponibilidad, más allá de la jornada laboral. ME INSPIRO.
Hoy me reconozco diferente y en construcción aún de mejorar gracias a ella.
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